Por Leonardo Parrini
Una noticia recorre el mundo musical: la legendaria banda británica Pink Floyd inicia desde este mes de septiembre la reedición “más completa” de toda su obra de rock sinfónico que estará disponible en todos los formatos digitales (CD, DVD, Blu-Ray y Super Audio CD) y para iPhone.
Roger Faxon, presidente de EMI Group, declaró que se trata de una colaboración “única” entre la compañía y uno de los grupos más creativos e influyentes de la historia de la música. “Hemos trabajado juntos durante más de un año en este proyecto que incorpora todos los elementos que ha hecho de Pink Floyd una de las fuerzas inspiradoras de la música moderna”, ha dicho el ejecutivo, quien explica que “Why Pink Floyd?” se debe a que “su música es única y la música de calidad nunca pasa de moda”.
El primer lanzamiento se hará el 26 de septiembre de 2011 con ediciones expandidas y especiales de “The dark side of the moon” en varios formatos digitales y también en un vinilo para coleccionistas.
El próximo 7 de noviembre comenzará la segunda fase del proyecto que se centrará en el álbum “Wish you were here”, incluyendo la única grabación de la histórica canción realizada por el legendario violinista de jazz Stephane Grappelli. Al mismo tiempo se publicará “A foot in the door: The best of Pink Floyd”, una colección de sus canciones de mayor éxito que se reúnen en un disco por primera vez en la historia de la banda.
Pink Floyd que, a partir de 1962, evolucionó del rock sicodélico al rock progresivo y, finalmente, a tonos de gran factura musical de un rock sinfónico de compleja polifonía, ha creado obras de oscura estética, cuya temática va desde la realidad existencial del individuo contemporáneo, hasta la tragedia épica de un mundo convulsionado por las guerras.
Con potente viso de denuncia la estética de Pink Floy, con claros puntos de ruptura con lo establecido, rebasa los esquemas expresionistas de una música llevada a lo más intenso de la armonía polifónica, con acompañamiento orquestal sinfónico e instrumentos electrónicos propios del rock clásico de los años sesenta y setenta.
La experiencia musical de Pink Floyd supone un acentuado virtuosismo con las guitarras acústicas de Gilmour, unidas a los fantasmagóricos acordes que el tecladista Wright saca al piano electrónico, sumado el profundo bajo de Rogers Water y la percusión de Mason de penetrante y sincopado ritmo.
La distorsión y el progresivo fraseo de guitarra punteada por Gilmour, pletórica primera guitarra de Pink Floyd, preñada de rabia insólita, incursiona en una experiencia sonora de brillantes acordes, “tan hermosos como crudos”, alcanzando una inédita dimensión musical. La reedición de la obra de Pink Floyd, supone el regreso de una expresión musical que ilumina, como una luz cenital, el oscuro signo de nuestros tiempos.